Este fin de semana he estado por Valencia visitando a la familia y he sacado un ratillo para instalarles Ubuntu para que lo usen mi madre y mis hermanicas. La verdad es que ya estaban un poco hartas de virus, spyware, pop-ups y demás animalejos que les tenían el ordenador medio colpasado e inusable. Aparte un mensaje amenazante indicando que su copia de guindows no era original también les inquietaba.

El proceso de instalación no fué sencillo ni user friendly, en primer lugar porque su ordenador aunque no es muy antiguo ya tiene unos años y está bastante corto de RAM (menos de 200Mb). Ahí chocamos con la primera piedra, y la verdad con una costumbre con la que yo no estoy nada de acuerdo, los instaladores live. Yo desde hace tiempo estoy totalmente en desacuerdo con ese tipo de instaladores, creo que una live es una live y sirve para ver cómo funciona una distro con un determinado hardware, pero no es la mejor forma de instalar. En las últimas versiones de Ubuntu se ha optado por esta opción y la verdad que cargar Gnome, Nautilus y varias cosas más hacía que el ordenador se arrastrase y fuese tan inusable que ni siquiera pude hacer el reparticionado de discos en modo gráfico. Total que descargué la otra versión de Ubuntu: alternate, que te permite hacer la instalación con el Debian Installer. Al parecer esta versión ya te permite reducir una partición NTFS para dejar hueco para tu linux pero no quedé seguro de la estabilidad y por miedo a perder datos bajé el Linux Rescue CD e hice la repartición con Qt-Parted.

Esta vez la instalación fué cómo la seda y en pocos minutos ya teniamos un arranque dual windows-linux sin perder un sólo dato. Ahora a añadir algunas cosillas útiles (amule, amsn, codecs de video, flash, java, rar, etc…) que les iban a ser muy útiles, cosa que con easy-ubuntu se hace en un pis-pas y con sólo seleccionar unas casillitas. Por último les instalé el cliente de no-ip para poder ubicar a su equipo y conectarme si alguna vez tengo que hacer alguna tarea de mantenimiento.

La verdad es que ahora están encantadas con su nuevo linux y espero que les dure el gozo por mucho tiempo. Ahh por último un pequeño apunte que he descubierto esta mañana leyendo el blog de Ian Murdock al respecto del pequeño conflicto Debian-Firefox: ¿sabéis de dónde viene la palabra Debian? Pues es algo tan sencillo cómo la unión del nombre de su creador Ian y de su esposa Deb, ya veis al final todo son «cosas de familia». 😀

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